In Eggleston we trust
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29 julio 2008
Una foto reclamada.
Ayer me reprocharon cariñosamente lo poco que actualizo este blog de un tiempo a esta parte. Es más, me dieron una razón de peso para procesar y poner esta foto que era la de renovar el fondo de escritorio.
Pues aquí la tienes, espero te valga. Si pinchas en la foto la verás en Panoramio y podrás comprobar que está tomada cerca del pico Javalambre.
25 julio 2008
Juan
Este verano lo estoy viviendo como si estuviera dentro de una campana de vacio. O quizás bajo el agua... no porque sienta que me falte el aire, eso lleva tiempo pasándome... sino más bien porque la realidad la percibo como apantallada, veo el mundo con un sonido parecido al que uno oye cuando en una piscina abarrotada mete la cabeza dentro del agua, se oye todo... pero no va contigo o parece no ir.
Aquí en esta foto aparece un tío muy majo: Juan. Y eso de ser majo, ser llano, saber contar cosas interesantes y saber escuchar... es un don cada vez menos común.
Supongo que todos los "retratos" son en esencia "retratos sicológicos". Aquí solo he pretendido reflejar un divertido cumpleaños... pero espero que, de rebote, me haya salido un "retrato algo sicológico".
15 julio 2008
La magna obra
En la foto se aprecia el estado actual en el que se encuentra la obra del Ágora. Otra de las megalomanías de nuestros internacional-provincianos prebostes y su (llamemosle así) "arquitecto" Santiago Calatrava.
Eso sí, cuando toca darle forma se ve aquello de "del dicho al hecho...".
En la vida, cada uno se marca sus propios proyectos. Todos tenemos (o todos deberíamos tener) uno o dos que prácticamente rozan el imposible. Imposibles sí, pero, de repente casi por sorpresa, estamos recorriendo parte del derrotero marcado. Como pilotos en el océano.
Sin embargo, en mitad del cámino, en mitad del océano... a veces reflexionas sobre si en realidad todo es una inmensa locura. Una locura del tamaño de una vida. Las dudas te asaltan y te ves solo. Todo el camino recorrido te ha dejado exhausto y sin embargo queda tanto, tanto por recorrer que las certezas que te impulsaban como velas se convierten en incertidumbres, miedos y dudas paralizantes.
Pero,
como ya dije una vez:
Navegar es necesario, vivir no.
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11 julio 2008
Mirando al suelo a veces ves el cielo.
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